Por Mabel Gonzalez Alfonso
LA
 HABANA. (MDH)- Con fuertes dolores en el abdomen, anemia, inflamación, 
azúcar en sangre elevada y otras patologías de índole crónicas y 
agudizadas en cautiverio se encuentra el prisionero político y 
Presidente del Mov de DH 10 de diciembre Raúl Rodríguez Soto en la 
penitenciaría de alta seguridad conocida por el Combinado del Este.
A
 Raúl hace más de cuatro meses que le fue detectado a través de 
ultrasonido una mancha dudosa en el hígado, con características 
tumorales, la no visibilidad de la cuna de la vesícula, así como del 
páncreas, y cálculos renales, entre otras alteraciones.
Este
 ultrasonido fue repetido a petición del médico de asistencia y arrojo 
los mismos resultados, además de que el enfermo continúa con síntomas 
agudos, constantes y de eminente preocupación para la familia, incluso 
para el mismo médico, según refirió éste.
Ante
 la situación peligrosa y preocupante en que se encuentra mi esposo, yo 
Mabel González Alfonso, Vice Presidenta del Mov de DH 10 de diciembre, 
cansada de pedirle ayuda a los médicos del hospital del Combinado del 
este, así como al oficial que atiende el caso por la sección 21 de la 
Seguridad del Estado, conocido por Libán, y en múltiples peticiones al 
jefe del penal Teniente Coronel Vargas, me dirigí a todas las instancias
 superiores que tienen que ver con cárceles y prisiones en ciudad de La 
Habana.
La
 única respuesta recibida hasta el momento es que hay escases de 
tomógrafos en los hospitales capitalinos, y que es muy difícil conseguir
 un turno para un prisionero y mucho menos político porque puede 
evadirse en el traslado.
Además
 no existe orientación para esos casos ya que con un ultrasonido se 
pueden detectar muchas cosas y no es necesaria la tomografía.
Frente
 a tan despiadada respuesta me argumente científicamente con galenos de 
otros centros asistenciales los cuales me afirmaron que el ultrasonido 
no es de completa fidelidad, que cuando existen dudas tumorales es 
necesaria la tomografía axial computarizada, y que el caso de mi esposo 
según mi explicación es de inmediata investigación.
Regrese
 con mi información científica al hospital del Combinado del Este, 
exponiéndole a los médicos de asistencia de mi esposo Raúl Rodríguez 
Soto la situación, expresándoles que temo por su vida, y ellos me 
afirmaron que nada pueden hacer al respecto ya que la orden de la 
tomografía tiene que venir de arriba.
Yo
 me pregunto, últimamente en Cuba, expresamente en las cárceles todo 
tiene que venir de arriba, como por ejemplo la licencia extrapenal 
autorizada por los médicos, y jefe del penal requiere de una firma de 
arriba, y no llega, a casi un año de aprobada, ahora la tomografía para 
determinar la gravedad de su caso también tiene que venir de arriba.
Y
 con la evasiva que todo tiene que venir de arriba mi esposo se agrava 
mucho mas diariamente, la anemia continua, el dolor es insoportable, las
 llagas en piernas y pies las tiene todas infestadas, los niveles de 
azúcar en sangre no bajan, y nadie hace nada por resolver esta 
situación, ni nadie me dice quien es la persona que tiene que autorizar 
de ARRIBA, a ver si existe o es una de las tantas mentiras a que nos 
tienen sometidos.
Por
 lo que denuncio al Mundo la situación que está presentando mi esposo el
 prisionero político Raúl Rodríguez Soto Presidente del Movimiento de 
Derechos Humanos 10 de diciembre en el hospital del Combinado del Este, 
por lo que de sucederle algo donde peligre su vida condeno y 
responsabilizo al gobierno de Cuba.

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