Dania Virgen García
En la tarde del día pasado día 12, en la prisión de máximo rigor La
26, más conocida por Kilo 8, en la provincia de Camagüey, se ahorcó el
preso con trastornos síquicos Gonzalo Falcón Rodríguez, natural de
Manatí, provincia Las Tunas, informaron los reos Roberto Muchulí y Noel
López González.
El reo había cumplido los 24 años un día antes, el 11 de julio.
Falcón estaba sancionado a 30 años de privación de libertad por asesinato.
Dos días antes de suicidarse fue trasladado a una celda de castigo, porque le habían encontrado sicofármacos.
Antes de suicidarse, Gonzalo le había enviado una nota a un pariente
que está recluido en la misma prisión, llamado Noel Falcón, a quien le
comunicó que había advertido a los carceleros que él era un enfermo
paranoico, que si no lo sacaban de la celda, iba suicidarse.
Los militares hicieron caso omiso a la advertencia del pariente.
Varios presos que lo conocían también dicen lo mismo. El joven les
había comentado días antes que se iba a suicidar.
Desde finales de 2012, en Kilo 8 han muerto más de cuatro reclusos.
Los reos Gabriel Cárdena Villalobos y Alfonso Fonseca Hidalgo se
ahorcaron estando en celdas de castigo. Ramón Aguilera León murió
producto de una golpiza que le propinaron varios carceleros en el área
La Incrementada; le dio un derrame cerebral, no fue asistido
inmediatamente y murió.
El reo Luis de la Rosa Aguilar se ahorcó en el
destacamento tres, el pasado mes de marzo.
El régimen especial, la primera fase, como le llaman los carceleros,
son celdas solitarias donde los presos pasan años sin tener
comunicaciones con nadie. La segunda fase son cubículos para cuatro
personas.
En estado grave, en terapia intensiva, en el Hospital provincial
Amalia Simoni, de Camaguey, está Osmel Bonilia Fenuti, un recluso de 27
años de edad, de Kilo 8, que el pasado 28 de junio se tomó alrededor
de 50 tabletas de fenobarbital.
dania.zuzy@gmail.com
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