Por Ana Aguililla Saladrigas
Rolando García Perera, preso desde hace once años, acusado de tráfico ilegal de personas, se encuentra en delicado estado de salud.
Su salud ha empeorado debido a un ayuno en oración que realiza desde hace un mes, y que iniciara al llegar a la Prisión de Guanajay procedente de la Prisión Combinado del Este (el último año lo pasó en la sala de penados del hospital militar Carlos J. Finlay).
García padece de cardiopatía isquémica grave, que pone en peligro su vida, así como hipertensión arterial, entre otras enfermedades, por lo que en el año 2006, Medicina Legal lo consideró incompatible con el sistema penitenciario, no obstante la policía política se niega a que sea puesto en libertad condicional.
Leonardo Rodríguez Pérez, miembro de la organización opositora Alianza Democrática Pinareña y fuente de esta información, explicó que en la actualidad Rolando se encuentra en una situación en extremo delicada. “Ni siquiera lo han llevado al médico porque rehúsa ponerse la ropa de preso. Además las autoridades están instigando a los demás presos a tomar acción contra él.”
Rodríguez agregó que la celda en que mantienen a García está en total oscuridad día y noche. No le permiten tomar el sol, ni recibir visitas familiares.
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