Por Dania Virgen García
El reo cubano-americano Carlos Alberto Pérez Ávila fue llevado en la tarde del miércoles 11 de abril de la prisión de Quivicán a la fiscalía de San José de las Lajas, ambas en la provincia Mayabeque, para confrontarlo con el reo Yoisel Izquierdo López, alias el Moyo, acusado de la misma causa.
Pérez Ávila fue llevado esposado de manos y pies a la fiscalía. El teniente Arrebato, el fiscal Osmani Julio Pavón y dos oficiales de la Brigada Especial, lo condujeron a una oficina con una cámara de video, donde fue sometido a un interrogatorio y un careo con el recluso López Izquierdo alias el Moyo.
En la confrontación, las últimas palabras de López Izquierdo alias El Moyo fueron que se arrepentía “de todo lo que había hecho”.
Yoisel Izquierdo López, alias el Moyo se encuentra ubicado trabajando en la jefatura del MININT en Mayabeque, por orden de su cuñado, Alexander Olivar, oficial del Departamento Técnico de Investigaciones (DTI) de la prisión de Melena, también en dicha provincia.
Carlos Alberto se encuentra en prisión desde hace cinco años, acusado de un asesinato que asegura no cometió. En la causa
165/2007 lo condenaron a treinta años de privación de libertad.
Cuando reclamó, en la revisión de causa se esclarecieron los hechos y se demostró su inocencia. El fiscal general de la república, Carlos Raúl Concepción Rangel, dejó claro que el acusado no cometió el delito y culpó a los fiscales y jueces de cometer fallos desatinados. No habiendo pruebas, fue anulada la sentencia y la retroacción del proceso.
No obstante, Carlos Alberto Pérez Ávila sigue en espera de que lo pongan en libertad. Ha estado en Villa Marista en tres ocasiones, donde le han reabierto el expediente y las pruebas en su contra han sido exactas.
A principios de año, el teniente coronel Emilio y otros instructores de Villa Marista, sede de la Seguridad del Estado, le prometieron que le sería cambiado el proceso y se le daría un cambio de medida, ya que estaba declarada su inocencia.
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