Por Movimiento de Derechos
Humanos 10 de Diciembre (MDH)
Comisión de Atención a los
Presos Políticos y sus familiares (CAPPF)
LA HABANA 27 de mayo del
2013 (8 PM)
Con 12 kg corporales de menos, fuerte dolor abdominal, anemia y un cumulo
de enfermedades agudizadas ante las condiciones infrahumanas en que se
encuentra en un calabozo de 3 por dos de ancho por largo junto a 9 prisioneros
mas, en el Edificio No1 piso segundo norte, se encuentra en pésimas condiciones
de salud física y psicológica el prisionero Presidente del Movimiento de
derechos humanos Raúl Rodríguez Soto.
A este calabozo hacinado lo envió el Capitán Riquember Jefe del Edificio 1,
después de obligarlo a terminar con la huelga de hambre de 10 días que pudo realizar Raúl, y por un fuerte sangramiento
digestivo alto que bajó mucho su hemoglobina tuvo que abandonar a la fuerza.
Este traslado se realizó en complicidad con el oficial Rubén de la Sección
21 de la Seguridad del Estado, simplemente porque discutió por sus derechos con el médico de asistencia del hospital del
Combinado, y éste no lo quieren en el centro de salud a pesar de sus
enfermedades todas complicadas por su condición de diabético tipo I.
Es decir que un médico se molesta con un recluso porque le exige sus
derechos y después se olvida que estudio medicina para curar al prójimo, y lo
condena a morir en un calabozo por braveza, afirman las fuentes.
Dian Pérez Borrero prisionero activista del Mov de DH 10 de diciembre en el
Combinado del Este, junto al resto de los miembros del grupo opositor afirman
que han elevado sus quejas sobre la salud de Raúl, y el abuso de meterlo en un
calabozo hacinado con nueve reclusos que todos fuman para complicarle mucho mas
sus condiciones pulmonares, que es necesario que sea llevado a un hospital
antes que se muera, pero nadie les hace caso, y cada día que pasa lo reprimen
mucho mas.
Su esposa la señora Mabel González Alfonso Vice Presidenta del Movimiento
enfatiza que nadie sabe qué mano se oculta detrás de todo este maltrato, de los
casi 11 meses que tuvieron a su esposo Rodríguez Soto del Hospital del
Combinado a la Covadonga, y nunca lo
operaron, encontrándose en criterio operatorio por cirujanos del lugar y ahora
termina hacinado en un calabozo de mala muerte.
No duda que la Seguridad del Estado este empeñada en destruir la psiquis no
sólo de su esposo, sino la de su madre y
más ahora que a causa de un desprendimiento de retina perdió la visión, y se
encuentra en difícil estado de salud emocional y como es lógico el fuerte de
este aparato fascista es este modus operandis
Saben que torturando a mi esposo la están torturando a ella, que si no lo
atiende un médico se complica aún más, y eso la destruye como madre. Dijo
Añade.¨ La madre de mi esposo es la periodista, escritora, y editora Adela
Soto Álvarez, vive en Miami como refugiada política, fue fundadora de la prensa
independiente en Cuba, y después de los hechos del 18 de marzo del 2003 tuvo
que viajar al exilio como refugiada política donde continúa luchando por la
libertad y la justicia¨.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario