León Padrón Azcuy, la habana lunes 6 de mayo 2013
Durante muchos años el régimen cubano en su
feroz lucha contra la oposición democrática, ha inventado un sinnúmero de figuras “delictivas” con el
objetivo de poder encarcelar a los oponentes, tergiversando y demonizando las
razones por las que luchan los defensores de la verdadera libertad. Ahí están
para dar prueba de ello: la peligrosidad social, el atentado y la resistencia
al arresto, la propaganda enemiga, el desacato a la figura del comandante en
jefe y muchas otras más que se les ocurran.
Bajo este oscuro laberinto, parece haber caído el joven Alexis Romero Orduñez, de quien por
estos días me hicieron llegar una carta, donde denuncia, desde la Prisión de Máxima Seguridad
Combinado de Guantánamo, las terribles condiciones por la que ha tenido que
pasar, a partir de su detención y enjuiciamiento en el mes de agosto del 2012 y
que lo mantienen cumpliendo una condena de diez años.
En una parte de la carta se puede leer…“jamás cometí el
delito que me imputan, soy inocente y estoy encarcelado por defender los
derechos humanos en mi país y ser miembro de un Partido político opositor en el
oriente cubano”.
En la misiva dirigida a Nuria de la Caridad del Risco,
Secretaria Ejecutiva de la Red de Biblioteca Cívica y Directora de la Biblioteca
A. Solzhenitsyn, ubicada al oeste de la capital, el reo escribe que pudo saber
de ella y de su dirección, gracias a un artículo publicado en la Revista
Misceláneas de Cuba que da cuenta del trabajo de los bibliotecarios, que
fortuitamente le prestaron en la prisión. Después de felicitarla por su lucha,
él le pide encarecidamente a Nuria que haga pública su terrible situación a
través de algún periodista independiente; y que si es posible envié su carta al
secretario general de las Naciones Unidas.
Romero Orduñez residente
en la calle Prado No 210 (Altos) entre Moncada y Agramonte, provincia de Guantánamo.
Describe que fue detenido desde el 7 de agosto del año pasado, cuando la
policía allanó su vivienda, sin causa, sin fundamento y sin prueba reales. Ese
día lo condujeron a la unidad de Operaciones Policiales (carretera El Salvador)
y lo torturaron, física y sicológicamente, manteniéndolo durante más de una
semana sin ropa alguna y esposado de pies y manos en un calabozo oscuro sin
agua, y maloliente.
Tras este hecho ignominioso y cruel, el prisionero fue
presentado el día 14 de agosto ante el tribunal provincial de Guantánamo, bajo
supuestas acusaciones de proxenetismo, “toda una falsa montada”, declara en su
carta. Posteriormente fue trasladado para la prisión combinado de Guantánamo, a
la que se refiere como un verdadero infierno. Opinión que coincide con tres
reconocidos opositores, prisioneros políticos cubanos que pasaron por esta
prisión hace un tiempo atrás, me refiero a Oscar Espinosa Chepes, Néstor
Rodríguez Lovaina y Randy Cabrera Mayor, quienes en su estadía allí, afirmaron lo mismo de este recinto.
Finalmente, el prisionero Romero Orduñez afirma que nada lo
podrá hacer cambiar de sus ideas. Ni aun
en las condiciones infrahumanas que lo
mantienen, con padecimiento de varias enfermedades que lo hacen incompatible
con el régimen penitenciario, y negándole la asistencia médica especializada. Una flagrante violación de lo establecido para
el cumplimiento de las reglas mínimas de trato a los prisioneros.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario