Bajo un fuerte operativo de la Seguridad del Estado se desarrolló el
viernes, en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología (INOR),
la vista pública donde se ventiló la impugnación del bioquímico Oscar Casanella a la medida de expulsión tomada en su contra el pasado 7 de junio.
Casanella dijo que la audiencia estuvo plagada de violaciones e
irregularidades "pues el local escogido para la realización de la vista
fue el Aula de Anatomía Patológica, lugar de difícil acceso y de espacio
reducido".
"Además presionaron a varios trabajadores del INOR para que
participaran como público y llenaran el local. Con eso tenían el
pretexto para no permitir la entrada de mis invitados", comentó el
científico a DIARIO DE CUBA.
"Utilizando la fuerza bruta, supuestos agentes de la Sección 21 (de
la Seguridad del Estado), que nunca se identificaron, impidieron el
acceso tanto del público que iba a apoyarme como de mis testigos, al
local donde se desarrolló la comparecencia 'pública'. Solo pudieron
pasar mi esposa y mi suegro. Este acto es violatorio del artículo 168
inciso g del Código del Trabajo, en donde se afirma el carácter público
de los procesos y documentos laborales", expresó Casanella.
"En las afueras del local se presentó la señora Raquel Acosta Porta
como la presidenta del Órgano de Justicia Laboral (OJL) de MEDICUBA y me
dijo que mis testigos y mi público no pueden pasar porque es solo para
los trabajadores", relató el científico. "Sin embargo, dentro del local
se esclareció que esta señora no era ni presidenta ni miembro del OJL de
MEDICUBA ni trabajadora del INOR. Dijo que venía en representación de
la administración de MEDICUBA cuando dicha administración no guarda
ninguna relación con este litigio", añadió.
"Paradójicamente, ni mis testigos ni mi primo Walter pudieron acceder
a la comparecencia, pero esta persona, totalmente ajena a este acto,
pudo asistir como público", criticó el bioquímico.
En representación de la administración del INOR, al comenzar la vista
compareció el vicedirector Lorenzo Anasagasti, quien acusó a Casanella
de mantener malas relaciones de trabajo con sus colegas y dijo que
muchas de sus afirmaciones eran falsas.
La administración presentó dos testigos que solo afirmaron estar
presentes cuando el bioquímico presuntamente le faltó el respeto a un
supuesto oficial del MININT el pasado 31 de mayo. Ese individuo, que
nunca se ha identificado, no compareció, a pesar de estar solicitada su
presencia como implicado en los hechos.
En su declaración, Oscar Casanella explicó que está sometido a
tratamiento desde el año 2014, por sufrir varias crisis diagnosticadas
por los médicos como "reacción situacional de naturaleza ansiosa".
El científico reveló que tanto la Fiscalía Municipal de Plaza de la
Revolución como la Dirección Provincial de Trabajo habían fallado a su
favor anulando el acuerdo del OJL del INOR, por las disímiles
violaciones al debido proceso en que incurrió ese órgano en un fallo
anterior en contra de Casanella.
El 3 de febrero, el OJL del INOR declaró "sin lugar" la reclamación
de Casanella contra la sanción de separación temporal por un mes y sin
retribución económica debido a una supuesta falta de respeto del
investigador contra el vicedirector Anasagasti.
"Esta respuesta de la Fiscalía Municipal fue ocultada por los
miembros del OJL del INOR a quienes fue notificada, con el evidente
objetivo de evadir la repetición de dicho proceso laboral.
Por todas
estas razones, es de carácter obligatorio repetir la comparecencia
pública de aquel momento y no considerar esa supuesta indisciplina como
antecedente para tomar la decisión de expulsarme del INOR", dijo
Casanella en la vista pública.
Casanella solo pudo contar con un testigo, el cual formaba parte de los trabajadores utilizados como público en la vista.
Este hombre "testificó a mi favor, aseverando que yo era un excelente
trabajador y que mantengo buenas relaciones profesionales y personales
con mis colegas.
Él me hizo recuperar la fe en la valentía y la dignidad
humana", comentó Casanella a DIARIO DE CUBA.
El científico considera que su expulsión del INOR tiene motivaciones
políticas, debido a su amistad con disidentes a los cuales conoció a
través de su amigo Ciro Javier Díaz Penedo, miembro de la banda
contestataria de punk-rock Porno para Ricardo.
El Órgano de Justicia Laboral que sesionó este viernes 22 de julio tiene 10 días hábiles para dictar su fallo.
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