POR Ana Aguililla.
“La comida que estamos recibiendo los presos es prácticamente incomible.” Dijo Carlos Cárdenas Cartaya, un colaborador que cumple sanción en la Prisión Especial de Camagüey, Kilo 8 La 26, vía telefónica.
“Nos dan por almuerzo y comida aporreado de pescado repleto de espinas, pata y pansa podrida, harina de maíz cruda y totalmente aguada, agua de potaje de chícharos, agua de picadillo de soya y en el desayuno agua de cerelác o de gofio sin azúcar.
Cárdenas Cartaya agregó que el director de la Prisión Especial de Camagüey, Kilo 8 La 26, Teniente Coronel Filiberto Hernández Ruiz se niega a dar merienda a los reos de este centro penitenciario que trabajan en una fábrica de materiales de construcción aledaña a la cárcel, ya que para garantizar la misma exige a la empresa PROBARI a la que pertenece la fábrica, que le pague un peso y veinte centavos por cada prisionero que labore allí.
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