La Habana, 21 de Noviembre 2011
Por: Joel Lázaro Carbonell
En la prisión de Guanajay, al preso político Raúl Rodríguez Soto, le continúan “suspendiendo las visitas familiares” para obligarlo a “vestir la ropa de preso”, denuncia este pasado sábado 19 por vía telefónica.
Rodríguez expone, que desde su ingreso a la prisión, a estado recibiendo torturas, agresiones sicológicas y en ocasiones, hasta maltratos físicos por parte de las autoridades penales, que cumplen indicaciones de los oficiales de la Seguridad del Estado (Policía Política); que a su vez, estos toman represarías contra el, por sus ideas y proceder contrarios a los del régimen castristas.
En días anteriores, a Raúl se le “suspendió la visita conyugal” por que el jefe de la prisión (Joaquín Darías Galainena)”se le antojo “de que vistiera el uniforme de recluso; su esposa Mabel que espero en las afueras de la instalación penal, no pudo verlo; ambos, no pudieron disfrutar de este Derecho. La Madre, Adela Soto, quien reside en los Estados Unidos, comunico por correo electrónico, que “el asunto era peor de lo que se conocía”, además de suspenderles las visitas, lo obligan a “desvestirse delante de los otros reclusos”, como además no le dejan pasar alimentos alguno.
Según el reglamento de Cárceles y Prisiones, la visitas familiares y conyugales reglamentarias de los reclusos, es un derecho, y no deben ser objeto de medidas por ningún concepto; en la que se aclara, que las de estímulos, si pueden ser afectadas por cometer indisciplinas, que no es el caso de Raúl.
Raulito, como le llama su madre, padece de múltiples enfermedades crónicas, agudizadas en cautiverio; la que mas aqueja, son dos Hernias Discales que oprimen la Medula Espinal que afectan gravemente el sistema de locomoción, lo cual lo tiene confinado a una silla de ruedas. Además es diabético tipo I, hipertenso, y padece de ulcera gástrica y gastrodeudenitis, entre otras patologías psicológicas todas graves.
Raúl Rodríguez Soto, posee un certificado emitido por un medico en el hospital del “Combinado del Este” (donde en varias ocasiones estuvo ingresado), en el cual le indica no ponerse el uniforme de preso, por este afectarle la piel, en su tela y su color químico. El Jefe del Centro Penitenciario de Guanajay, conociendo eso, esta procediendo contrario a las indicaciones medicas. – Según soto- “este, en mi día de visita me dice que no le importa lo que le diga el medico, que si no me pongo el uniforme, no voy a ver a mi familia”.
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