Por Dania Virgen García
El recluso Ángel Casanova Alfonso, de 25 años de edad, se encuentra en silla de rueda como resultado de una huelga de hambre de 96 días que hizo para reclamar su inocencia.
A Casanova lo acusaron de un robo que asegura no cometió. El coronel Etián González Riva y el coronel Lázaro, de la Seguridad del Estado, afirmaron que las huellas de Casanova encontradas están en varios lugares de la casa en Guanabo donde se produjo el robo. Pero el joven asegura nunca haber estado en esa casa. Cuando ocurrió el delito, Casanova se encontraba en libertad condicional y había hecho iyabó.
Ángel Casanova, comenzó la huelga de hambre en la unidad de instrucción penal de Alamar, donde estuvo 31 días. Fue trasladado para Villa Marista y con posterioridad llevado para la sala de la Seguridad del Estado del hospital Carlos J. Finlay, donde permaneció por un mes y 17 días, hasta que fue trasladado para el hospital Julio Trigo, en Arroyo Naranjo, donde se encuentra ahora.
Su madre fue amenazada por los oficiales Etián y Lázaro de que si intentaba otra vez dar información a esta periodista la iban a encerrar en un calabozo de una unidad de la PNR por tres días o sería enviada para la prisión de Manto Negro.
dania.zuzy@gmail.com
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